En la adopción de la Estrategia para los Derechos del Niño (2012-2015), el Consejo de Europa enumeró siete buenas razones para promover los derechos de los niños “en cualquier lugar y para cualquier persona”.
1. «Los niños no son pequeños seres humanos con pequeños derechos humanos».
Los niños tienen derechos garantizados por varias convenciones: a nivel global por la Convención de los Derechos del Niño y a nivel europeo por la Convención europea de los Derechos Humanos y la Carta social europea.
2. «Los niños son vulnerables. Debemos protegerles más, no menos».
Los niños son víctimas de diversos tipos de violencia en la escuela, en internet, en la calle, en los centros de detención e incluso en sus casas. Los adultos tienen la obligación de prestarles atención y protegerles en cualquier circunstancia.
3. «Nada justifica la violencia hacia los niños».
En algunos países así como en determinadas familias las prácticas religiosas o tradicionales que dañan los niños se siguen a pies juntillas. No se debe golpear a un niño, mutilarlo, humillarlo o abusar de él.
4. «Cualquier tipo de violencia hacia los niños se puede evitar».
A menudo, las víctimas no se atreven a denunciar abusos y quedan a merced de su agresor incluso aunque este pudiera ser castigado. En muchos casos el niño no es tomado en serio. Por este motivo, el Consejo de Europa ayuda a los Estados miembros a establecer estrategias para prevenir la violencia hacia los niños.
5. «La protección de los niños necesita un enfoque estratégico».
La política nacional de cada país debe participar e incluir a todos los actores estratégicos.
6. «Los derechos de los niños nos afectan a todos».
Todos nos vemos afectados por los derechos de los niños. Desde los padres a los abuelos, desde un desconocido en autobús al cartero, todos hasta el Estado y asociaciones.
7. “Europa se nutre de los derechos de los niños”.
El Consejo de Europa desea una Europa que se asemeje a la visión del futuro que lucha por construir para los niños: un lugar seguro en dónde los niños tienen la oportunidad de crecer en un buen ambiente y en dónde todos pueden gozar del privilegio de la felicidad.
